La muerte silenciosa,

por el camino se acerca.

Busca el destino

del buen prisionero.

Las ramas tiritan,

bajo su andar frío

el cielo enmudece

cuando al final llega.

Es muy sencilla

sin flores, sin vida,

perfecta para el niño

que cuenta sus días.

Sin alas ni viento

el cuerpo se estrella,

es el único destino

del buen prisionero.

 

 

 

Ann Rubio Poesia , ,

Deixa un comentari

L'adreça electrònica no es publicarà. Els camps necessaris estan marcats amb *